¿Qué son los residuos sanitarios?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define los residuos sanitarios como «todas las formas de desechos generados por las instalaciones de atención médica». Cualquier objeto (por ejemplo, vendas, jeringas, sábanas, etc.) que haya entrado en contacto con cualquier forma de fluido corporal se considera potencialmente infeccioso y peligroso. Eso hace que hasta el 20% de los desechos médicos que se generan diariamente sean peligrosos. Según la OMS, los países de ingresos altos están generando aproximadamente 0,5 kg de desechos peligrosos por cama de hospital (por día). Los países de menores ingresos generan aproximadamente 0,2 kg por cama de hospital (por día) y las cifras van en aumento.
Residuos peligrosos
Residuos infecciosos: residuos contaminados con cualquier forma de fluidos corporales (por ejemplo, instrumentos médicos desechados, sutura, kits de muestras, cultivos de laboratorio, vendajes, etc.), así como residuos infectados de pacientes.
Desechos cortantes: equipo quirúrgico afilado (bisturís y cuchillas desechables), jeringas, agujas, etc.
Residuos patológicos: cadáveres contaminados (animales), tejidos tejidos, órganos o fluidos humanos, partes del cuerpo, tejido fetal, etc.
Residuos farmacéuticos: medicamentos vencidos o contaminados, vacunas no utilizadas, etc.
Residuos citotóxicos: residuos que contienen propiedades genotóxicas (por ejemplo, medicamentos contra el cáncer: mutagénicos, teratogénicos o cancerígenos, conocidos por ser altamente peligrosos).
Residuos radiactivos: productos contaminados por radionucleidos (por ejemplo, materiales radioterapéuticos).